Bestie, no te imaginas lo increíble que fue el Aerie Fest de este año. Fue mucho más que un simple festival; fue un espacio lleno de inspiración, apoyo mutuo y una verdadera celebración de lo que significa ser tú misma. Desde que llegué, sentí una vibra tan positiva y empoderadora que supe que sería un día especial.

Lo que más me impresionó fue el enfoque en el verdadero sentido de “Women Support Other Women”. A veces, esta frase se siente como un cliché, pero en el Aerie Fest, la hicieron realidad de una manera tan auténtica y poderosa. Una de las partes más impactantes del evento fueron las charlas de las speakers invitadas, mujeres que han hecho cosas increíbles en sus vidas y que compartieron sus historias con nosotras.

Primero estuvo Alexa Moreno, la gimnasta mexicana que ha desafiado todas las expectativas en un deporte conocido por sus altos estándares y exigencias. Alexa habló con una humildad y una fuerza que nos dejaron a todas admiradas. Compartió su experiencia de cómo fue superando críticas y prejuicios para llegar a ser una de las mejores gimnastas del mundo. Nos recordó la importancia de la resiliencia y de seguir adelante a pesar de las adversidades, manteniendo siempre en mente que nuestro valor no depende de la opinión de los demás.

Luego, tuvimos a Romina Sacre, una escritora y empresaria que ha hecho de la autenticidad su bandera. Romina nos contó sobre su camino hacia la autoaceptación y cómo ha utilizado sus plataformas para promover el amor propio y la libertad de ser uno mismo. Fue inspirador escuchar cómo Romina ha aprendido a abrazar sus imperfecciones y cómo alienta a otras mujeres a hacer lo mismo. Su mensaje fue claro: ser auténtica es un acto de valentía, y es lo que nos hace únicas y poderosas.

Otra speaker que realmente me inspiró fue Leslie Polinesia, una de las creadoras de contenido más influyentes en Latinoamérica. Leslie habló sobre el poder de la comunidad y cómo ha utilizado su influencia para crear un espacio positivo y de apoyo para sus seguidores. Nos contó cómo, a lo largo de su carrera, ha enfrentado la presión de las expectativas externas, pero ha encontrado fuerza en la conexión con su audiencia y en el apoyo de otras mujeres en la industria. Su charla fue un recordatorio de que juntas somos más fuertes y de que es posible crear un cambio real cuando nos apoyamos mutuamente.

María Bolio, miembro del podcast “6 de copas”, fue la encargada de conducir el evento, y lo hizo de una manera tan cálida y cercana que todas nos sentimos en confianza. María no solo moderó las charlas, sino que también compartió sus propias experiencias, haciendo que cada conversación fuera aún más enriquecedora. Su papel en el evento fue crucial para crear ese ambiente de sororidad y apoyo que todas sentimos desde el primer momento.

El Aerie Fest fue un lugar para celebrar la libertad de ser tú misma, sin juicios ni presiones. Hubo talleres de autoexpresión, desde arte hasta moda, donde podíamos crear algo único que representara quiénes somos. Y ni hablar de los desfiles de moda, donde la diversidad y la inclusión fueron las verdaderas protagonistas. Ver a mujeres de todas las formas, tamaños y colores caminar con confianza fue algo que realmente me llenó de orgullo.

Salir del Aerie Fest me dejó con una sensación de esperanza y gratitud. Fue un recordatorio de lo poderosa que es la solidaridad entre mujeres y de lo importante que es rodearnos de personas que nos apoyen y nos eleven. Te lo digo en serio, amiga, si alguna vez tienes la oportunidad de ir a un evento como este, no lo dudes. Es una experiencia que te cambia, que te llena de energía y que te hace sentir que no estás sola en este camino.

El Aerie Fest fue más que un evento; fue un movimiento que nos recordó que ser auténticas, apoyarnos entre nosotras y celebrar nuestras diferencias, el verdadero camino hacia el empoderamiento. Salí de allí sintiendo que puedo conquistar el mundo, y quiero que sepas que, como mujeres, juntas podemos lograr cualquier cosa. ¡Te cuento más detalles cuando nos veamos, pero de verdad, esto fue algo que todas deberíamos vivir al menos una vez en la vida!