Algo que noté estos últimos días tanto en Instagram como X es la negatividad de los Millennials con la Gen Z, respecto a inspirarse en leyendas musicales de su época, tipo Britney Spears. 

Se ha vuelto tan normal ‘copiar’ icónicos outfits, pero aquel que usó Tyla en Coachella, ha generado una liosa y severa polémica. Al verla rápidamente, el flashback era inevitable. La intérprete de “Baby One More Time” no imaginó que su sexy conjunto de los MTV Video Music Awards de 2001, fuera una molestia y debate. 

La cosa se puso turbia cuando la web atacó a Tyla por llevar un top verde con flores y pantalones cortos vaqueros desabrochados con flecos, llamándola ‘imitadora y creida’. No obstante, la gente se exalta demasiado con las similitudes. Besties, es algo innecesario tal ridículo enfado. El de Britney, estaba adornado con cristales, una silueta entrecruzada árabe y era más ostentoso por la cantidad excesiva de lentejuelas. ¡Tyla no tenía la cadente pitón del amazonas que serpenteaba al ritmo de I’m A Slave 4 U! — un slay bonus a la divina princesa del pop. 

Claro, no es descabellado el ‘no intencionado’ homenaje festivalero, pero los ‘00s están de regreso y sería raro que alguien como Tyla no luzca algo de este periodo. 

Boberías. Period.