Todas las girlies son angelicales y etéreas––más cuando Rosalia predica con el ejemplo. Mientras nuestra catalana favorita nos endulza el alma con las melodías beatificadas de su álbum Lux, su pelo ha sido consagrado por la mano divina.
Personificando esta nueva etapa de su vida, la motomami se pintó un halo semipermanente en la cabeza. ¡Un experimento celestial que, literal, purifica su mente del pecado!
La belleza celestial es arriesgada, pero simbólica.
En un video de TikTok, la cantante mostró todo el proceso: un grupo de estilistas trazó con precisión una línea circular sobre su pelo castaño, decolorándola hasta convertirla en un aro de luz. El resultado es una especie de corona luminosa que parece permanente. Bendecida por los santos, esta franja simboliza la unión entre lo divino y lo terrenal.
Curiosamente, esta idea es usada en el manga y el anime, cuando los artistas quieren mostrar brillo, dejan líneas blancas sobre el pelo para simular la luz. Rosalia le dio un contraste más dramático al teñir su pelo con un color fantasía: encarna la idea de encontrar lo sagrado en lo cotidiano. Un manifiesto que se sostiene gracias a la fe y la esperanza.
Con su melena infinita–– de textura virgen sacada de alguna pintura renacentista–– Rosalía eleva lo sagrado con un gesto altamente femenino.
